Pedro y Buenos Aires, por Ana Aldaburu

Pedro y su película. Aunque parezca intempestivo, comienzo por un agradecimiento: tenemos que agradecer a Damián y Matías Roth sus hijos. A Damián más allá de haber concretado la película, por su asistencia en todos los sentidos y por su paciencia. A los dos, siempre, porque tener un padre de 84 años que maquina varios proyectos por día y que hace todo lo posible por concretarlos y las más de las veces lo logra, no es poca cosa. Es una cuestión de entusiasmo y amor. El arte es un fenómeno urbano. El arte acontece en la ciudad. Y si hay alguien que conoce nuestra ciudad es Pedro Roth. Una camina con él, o va en auto y no para de señalar edificios, te narra su historia, te describe su estilo o la gente que vive o vivió allí, qué episodios, qué historias, qué encuentros o desencuentros…Pedro es la memoria viva de un inmigrante que ha hecho de Buenos Aires su segunda piel, su casa por elección y por afecto. Conocemos las múltiples derivas de esta enorme ...