El negador de milagros, por Herbert Giles



 



Chu Fu Tze, negador de milagros, había muerto; lo velaba su yerno. Al amanecer, el ataúd se elevó y quedó suspendido en el aire, a dos cuartas del suelo. El piadoso yerno se horrorizó. "Oh, venerado suegro", suplicó, "no destruyas mi fe en que son imposibles los milagros". El ataúd, entonces, descendió lentamente, y el yerno recuperó la fe.




Citado por Giles en Confucianism and its Rivals, Lecture VIII, 1915

Antología de la literatura fantástica, Jorge Luis Borges - Adolfo Bioy Casares - Silvina Ocampo (Editorial Sudamericana, 1965)

Imagen: Une semaine de bonté, ou Les sept eléments capitaux (A Week of Kindness) , vol. 1, 1934 - Max Ernst

Comentarios

Entradas populares de este blog

Esa belleza, por John Berger

Mineros, por John Berger

M, por Luna Malfatti