Las formas del agua, por Juan Carlos Capurro



En apenas unas horas, los habitantes de la Tierra podemos trasladarnos, materialmente, a cualquier ciudad del mundo. Se toma la decisión, se compra un boleto aéreo, en cuotas o a través de ofertas en Internet, y aterrizamos, sin haber tenido tiempo a prepararnos para ese verdadero pasaje, del alma y del cuerpo.

Esa posibilidad tan concreta, tan realizable, ha dejado sin embargo de existir, al mismo tiempo, para millones de personas. Nunca hubiéramos pensando hace unos años, que esa conquista democrática, tan actual, iba a retroceder más de cien años.

De eso trata esta muestra. De nuestra caída desde el cielo al agua.

Del agua que trajo a muchos de nuestros antepasados, como lo expone Lucas Jalowski en sus apuntes familiares. Del agua que se negó en el territorio patagónico de los conquistadores, en las imágenes de Monica Girón. Del agua que dejó atrás Lucas Niveiro, cuando salio desde Corrientes para migrar a Buenos Aires. Del agua que horada los pequeños remos vacilantes de José Luis Tuñon. Del agua que aprieta la balsa con los frágiles refugiados en la obra de Diana Dowek. Del agua que procura transportar a los migrantes al Lugar del Deseo, en la nave-ballena del colectivo Estrella del Oriente.  

Estamos asistiendo en esta muestra al retroceso de nuestra época hacia las formas del agua; época en la que se había proclamado, con orgullo, nuestra conquista de los cielos.

En cada caso, esa caída tiene la signatura del imaginario propio y único de los artistas convocados. Pero en todos habita un lugar común: el de la desolación ante el carácter del viaje al que nos vemos, como Humanidad, obligados a emprender., en esta particular época convulsionada.

El viaje, que podría hacerse en poco tiempo, lleva en las imágenes aquí reunidas, por imperativo de lo que esta ocurriendo a un desarrollo muy lento. La decisión de Niveiro de ir llegando lentamente a Buenos Aires, con sus fronteras invisibles. La pausada desolación para arribar a una tierra árida o fértil, según dicte el azar de alguna burocracia, en Girón. El arduo trámite de meses y años, en las familias laboriosas de Jalowski. La fotos, precisas y preciosas, que documentan el recorrido de Tuñon. La fuerte decisión desesperada de los agarrados a esa balsa solitaria de Dowek. La conversión en obras de arte, como última posibilidad de burlar la Ley, en Estrella del Oriente.

Viajeros que decidieron tomar el cielo por asalto, porque el cielo les quiere ser negado.

Estamos nuevamente en los barcos, en las balsas, en los carros. La diferencia es que estamos en ellos, como hace mas de cien años, porque las trabas de fronteras, de ciudades, de guerras, nos obligan a volver a ellos, con tenacidad, para luchar por un lugar en el mundo.

Este es el hilo conductor de un conjunto de obras maravillosas, unidas por el azar objetivo de nuestro tiempo.



Juan Carlos Capurro. 


Muestra "El viaje"
Salas Federales
San Martín 871 - CABA
Desde el 10 de agosto - 19 hs 

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