Todos los besos, por María Negro

Tenía los ojos negros más bellos que había visto en mi vida. Yo quería pasarle la respuesta del examen, pero se me cayeron los machetes debajo del banco.
- Estúpida, me dijo mientras la maestra le sacaba la hoja a él, que decía que sí, que los machetes eran suyos, que era el único responsable.
Me puse a llorar sin poder explicarle a nadie porqué lloraba.
Fuimos al recreo y todo me pareció tan triste. Cómo es posible meter en problemas tan rápidamente a alguien por querer ayudarlo. A él, que tenía los ojos negros mas lindos del mundo y una nota de la maestra con lapicera roja.
Para cuando terminó el recreo, Cristian me buscó en la fila de las nenas y me dio un chocolate Cabsha.
- Te dije estúpida de bronca. Vos sos re linda...
Cerré los ojos apretando el chocolate de vergüenza. Por eso no es posible recordar en imágenes esos segundos ciegos donde su boca se acercaría a la mia. Donde todos los besos del universo comenzarían de una vez.

María Negro